La iglesia de Santa María del Camino o de la Victoria recibe al peregrino que llega a este lugar. Se halla a la vera del Camino y ante ella quedan restos de la muralla medieval
Finalmente después del alborozo llega de nuevo el trabajo, el último esfuerzo de recogida. Acompañado eso sí, de regocijo por la satisfacción de una jornada llena de gamas de color. Incluso los más peques colaboran con sus carretillos de juguete.
Enorawena vecinos. Ha sido un placer ver tan laborioso resultado.
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